Ediciones Universidad de Salamanca / CC BY-NC-SA Ciencia Policial, 182, 271-311 305 Explorando las huellas digitales de los criptoactivos mediante fuentes abiertas Díaz Bernardos, A. • El uso de los criptoactivos ha experimentado un notorio aumento en los últimos años, introduciendo consigo una serie de conceptos novedosos en la economía española. Este fenómeno ha permitido a los usuarios operar de nuevas formas, lo que entraña una serie de ventajas y riesgos inherentes que deberían conocer. • Por ello, adquirir conocimientos sobre trazabilidad resulta de gran utilidad no solo desde la perspectiva policial, sino también como ciudadano inmerso en una sociedad donde la tecnología Blockchain y los criptoactivos ganan cada vez más terreno. De esta manera, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad pueden rastrear fondos fraudulentos y localizar a los criminales que abusan de estos elementos y, al mismo tiempo, los ciudadanos pueden verificar el estado de sus transacciones mediante esta tecnología, que ha llegado para quedarse. • Debido al incremento en el uso de los criptoactivos, su presencia en las investigaciones policiales también ha crecido, presentándose de diferentes formas: utilizados como método de pago, en operativas de blanqueos de capitales procedentes de diferentes tipologías delictivas y también como productos de inversión que sirven de reclamo en estafas. Son varios los elementos que dificultan su seguimiento e incautación y que resultan de interés para los delincuentes, como son la rapidez que presentan las transacciones con estos activos, su carácter internacional y, en cierta medida, su anonimato. • Este panorama social ha generado la necesidad de muchos países de ponerse al día en materia de criptoactivos, colocándolos en una posición preferente en su agenda normativa. Un ejemplo es el Reglamento de Mercados de Criptoactivos (MICA) [Reglamento (UE) 2023/1114 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de mayo de 2023, relativo a los mercados de criptoactivos], que se ha convertido en el primer instrumento regulador de estos activos, pero que no será de aplicación hasta el 30 de diciembre de 2024 como dice su artículo 149. Esta norma ha dado cobertura jurídica a los criptoactivos y establecido unas reglas comunes a todos los operadores en la Unión Europea.
RkJQdWJsaXNoZXIy MzA5NDI2